Cuando el sur de Holanda se sumerge en la temporada festiva y Eindhoven se llama Lampegat durante unos días, el PSV juega sus partidos fuera de casa. Para preparar el Excelsior - PSV, recordamos tres "partidos de carnaval" especiales de la historia reciente del PSV. Desde el duelo en Groningen hasta De Koef en Woudestein.
Salida
El PSV ganó 10 de los últimos 13 partidos durante el periodo de carnaval y, desde 2005, es el único club de la Liga Premier que gana más veces que pierde en Carnaval. La última vez que al PSV le fue horriblemente mal fue encuentrenl domingo de Carnaval, el equipo del entonces entrenador Fred Rutten perdió 3-0 encuentros casa enningen. Hyun Jun Suk fue el hombre más célebre del Groningen aquel día. Él anotó el 1-0 y el 3-0. Leandro Bacuna firmó el otro gol. Una imagen que muchos nunca olvidarán es la cara de dolor de dos hinchas del PSV que habían viajado al Norte vestidos de payasos.
El comienzo de la "era PSV
La temporada 2013-14 comenzó llena de esperanza, pero rápidamente se convirtió en una pesadilla. Un PSV extremadamente rejuvenecido aprendió rápidamente las leyes de rendir al máximo nivel. Se saldó con grandes derrotas, pero resultó ser la mejor curva de aprendizaje para el debutante entrenador Phillip Cocu y su plantilla. Un año más tarde, su equipo se proclamaría campeón, seguido de dos títulos más. Muchas de las victorias bajo el mando de Cocu se lograron gracias a goles en las fases finales del partido. El 1 de marzo de 2014 se dio el pistoletazo de salida.
En Deventer, un público carnavalesco ve cómo el PSV va perdiendo 2-0 contra el Go Ahead Eagles en 25 minutos. '¿No ha aprendido nada el PSV de la primera parte de la temporada?', se preguntan muchos. Tras el descanso, el partido se inclinó por completo. Memphis y Locadia -dos campeones posteriores- acercan al PSV, y en la prórroga estalla el palco cuando el mercenario Bryan Ruiz firma el 2-3. El PSV volvió a casa con un triplete.
Drama de los penaltis
Casualmente, el PSV también jugó contra el Excelsior hace casi exactamente ocho años, durante el Carnaval. Un partido que muchos hinchas recordarán también por su dramático desenlace para el Excelsior. A medida que el reloj se acerca al minuto 90, el PSV sigue ganando 2-1 en Rotterdam. El árbitro Danny Makkelie -de nuevo arbitrando el sábado- considera deliberada una inocente mano de Marcelo y señala el punto fatídico. Edwin de Graaf no falló y firmó el 2-2. En el escaso minuto restante, el PSV bombeó el balón hacia adelante. En la línea de fondo, Danny Koevermans se bate en duelo con el guardameta Nico Pellatz. De Koef cae y ve cómo Makkelie señala de nuevo el punto de penalti. Balázs Dzsudzsák no tiene culpa: 2-3.