Explorado como jugador de campo, pero completamente transformado en portero; es la historia del PSV de Niek Schiks. Un libro con un final abierto, ya que el portero de 19 años de edad, cofooted trabaja duro para un gran avance en PSV U21.
Con los guantes puestos
En el JVC Cuijck, Niek jugaba encuentrennsa o encuentros el ceenampo. Allí impresionó a los ojeadores del PSV. "No era muy rápido, pero tenía una buena técnica", explica. Nunca se le había ocurrido jugar de portero, hasta que tuvo que sustituirle durante un torneo. "Los entrenadores se dieron cuenta enseguida de que tenía talento. Encuentros los años siguEnterné el juego de campo con la portería, pero a partir de la categoría O13 me decanté completamente por la portería", cuenta Niek, que ya ha jugado casi 30 partidos oficiales con el PSV U21.
Así que su cambio de posición resultó ser un acierto, incluso el propio portero lo sabe: "En retrospectiva, obviamente estoy muy contento con ello, sobre todo cuando veo los lugares a los que he llegado y lo que me aporta; jugar para este club durante tanto tiempo". Se describe a sí mismo como un portero implicado. "Me implico mucho con mi equipo, sobre todo con los cuatro defensas que tengo delante. Me comunico mucho y no tengo pelos en la lengua al hacerlo". Niek también se implica futbolísticamente. "Disfruto con ello. Con el balón, se nota que tengo pasado futbolístico, soy dos piernas y tengo un buen pase en casa. Por suerte, la principal tarea de un portero, parar balones, también me va bien", ríe. "Cuanto más paro, más lejos llego".
Sueño de infancia
Niek no conoce nada mejor que jugar en el PSV. Todavía recuerda con claridad cómo lo veía de pequeño: "Era muy consciente de que el PSV era un club muy grande, pero en aquella época lo que más te preocupa es 'jugar bien al fútbol'. Vivía el sueño de mis compañeros". Según el joven de 19 años, es bueno no adelantarse a los acontecimientos cuando llevas más tiempo en un club profesional. "Hay que vigilar que no se convierta en algo normal jugar en el PSV, porque hay muchos chicos que querrían eso. Siempre intento tener los pies en la tierra, y creo que aún lo consigo bastante bien. Eso se debe también a la gente del club: los compañeros, el personal y los entrenadores me mantienen con los dos pies en el suelo".
Luchando por su puesto
En el PSV U21, Roy Steur y Kjell Peersman también tienen minutos de juego. Sin embargo, no se trata de una amarga atmósfera competitiva. "Es muy sencillo: juegas encuentren de primera a un nivel decente, así que el listón está alto. Eso es bueno para todos, porque nos hace mejores. Al final, los mejores saldrán victoriosos. Ese pensamiento me motiva para dar la cara encuentros los pen
Mientras tanto, Niek ha estado varias veces en el campo de entrenamiento con la selección A. "Todo futbolista joven sueña con esto. Desde mi llegada, éste era mi objetivo, así que la primera vez conllevó los nervios necesarios. También acabé acostumbrándome a medida que iba conociendo mejor a los chicos". Sus compañeros porteros desempeñaron un papel importante en ello. "Boy Waterman es como un mentor para mí, siempre puedo acudir a él. El hecho de que él y Joël Drommel hablen neerlandés me viene muy bien. Walter Benítez es una auténtica bestia en la portería, también aprendo mucho de él. Observo a jugadores experimentados, lo que me ayuda a mejorar mi juego y a desarrollar un estilo de juego único".
