Mientras tanto, se encamina hacia los cuatrocientos partidos en el fútbol profesional. Algunos de ellos los hizo bajo el larguero del Phillips Stadium, ya que Remko Pasveer fue jugador del PSV de 2014 a 2017. Este domingo, sin embargo, defenderá la portería del Vitesse en su visita al Phillips Stadium.
El guardameta, de 37 años, recuerda con buen sabor de boca su etapa en el PSV. "A pesar de no haber jugado mucho, fue una época muy bonita. Hice muchos amigos en Eindhoven y sigo en contacto con ellos. El PSV se adapta tremendamente bien a mi carácter. Es un club familiar, me encantó ese ambiente tan cálido".
Aparte de lo bien que lo pasó Pasveer en el PSV, también fue un periodo exitoso deportivamente. "Fuimos campeones dos veces y sobrevivimos a la fase de grupos de la Liga de Campeones. Teníamos una buena selección. Sólo que no pude jugar mucho, así que después de tres años quise empezar de nuevo en algún sitio. El Vitesse se puso en contacto conmigo, así que fui a buscar mi oportunidad en Arnhem".
El Vitesse está haciendo una temporada muy buena. El equipo estuvo incluso en segunda posición durante mucho tiempo. Sin embargo, no han ganado los últimos cuatro partidos, pero Pasveer espera cambiar esa situación el domingo. "Le doy todo al PSV, pero en el campo soy un deportista de élite y siempre quiero ganar. Creo que precisamente un club de primera es un buen rival para nosotros ahora. Un partido así te exige más como equipo y puede ayudarnos a salir del atolladero".
El Vitesse también está haciendo un buen papel en la Copa. Se ha clasificado para semifinales y se enfrentará al VVV-Venlo en casa el 2 de marzo. Pasveer mantiene que hacerse con un premio tangible esta temporada sería lo máximo, pero si tuviera que elegir entre la copa o la segunda plaza de no lo dudaría mucho. "Conseguir un premio es muy bonito para el Vitesse. Sólo el segundo puesto nos da derecho a las rondas preliminares de la Liga de Campeones. Eso es por supuesto muy interesante desde el punto de vista deportivo y financiero. Así que, si tuviera que elegir, me decantaría por el segundo puesto".
Pasveer siempre espera con ilusión el reencuentro con el PSV, "siempre son partidos bonitos". Aun así, tendrá que buscar con cuidado caras conocidas: Sólo Rosario y Marco van Ginkel estaban con él en la plantilla. "Pablo estaba justo contra el primero en ese momento. También estaba Jorrit Hendrix, por supuesto, pero acaba de irse al Spartak de Moscú. El personal también es completamente distinto, incluso Mart van den Heuvel cumple ahora una función diferente, con Mart sigo en contacto. El encargado del material y el fisioterapeuta siguen allí, con ellos puedo ponerme al día muy bien".
No se atreve a decir si volveremos a ver a Pasveer en el PSV. "Si mi cuerpo me lo permite, estaré bajo los palos unos años más. Después quiero tomarme un descanso tras tantos años de deporte de élite. Aunque supongo que pronto volverá a picarme. Quizá me haga entrenador de porteros o algo así. Siempre he disfrutado en Eindhoven. Quién sabe".
