El Excelsior juega sus partidos en casa a las 15.00 horas. Por lo tanto, todo el mundo pudo dormir hasta tarde. Eso también se agradece a veces los sábados. La salida estaba prevista para las 12.45 horas.
Como cuatro jugadores habían sido transferidos al C1, sólo teníamos dos suplentes, incluido un portero. Así todos pueden jugar bien, pero no pueden pasar demasiadas cosas.
En los primeros minutos del partido, el Excelsior dispuso de dos ocasiones, pero ya en el minuto 4 el PSV consiguió adelantarse 0-1. Gregory gana un duelo en campo contrario y pasa el balón a Sekou, que queda libre para encarar al portero. De nuevo no falla y desliza el balón por delante del guardameta hacia la red.
El PSV controla totalmente el partido, pero hay que esperar hasta el minuto 30 para que esto se refleje en un gol. Una buena combinación por la derecha entre Vince y Sekou permite a este último pasar el balón desde la línea de fondo al segundo palo. Arne se adelanta bien y no tiene problemas para anotar el 0-2. Poco después, Sekou consigue conquistar de nuevo el balón, colocarse libre delante del portero y, como suele ocurrir, vuelve a dejar al guardameta sin ocasión.
0-3 es el marcador al descanso.
Tras el descanso, el PSV salió inmediatamente a la caza de más goles. Ya en el segundo minuto se convierte en 0-4. Esta vez un remate dominical del balón de Sekou. Pero éste también cuenta, cumpliendo su promesa de tres goles. El 0-5 cae en el minuto 10 de la segunda parte. Benji pasa el balón a Gregory, que remata solo y marca su gol.
0-6 en el minuto 23 gracias a un pase en profundidad de Sekou a Arne por la izquierda. Arne pasa el balón a través del campo a Sem, que, recién entrado, se encuentra de nuevo en el lugar exacto para completar con éxito el ataque. Casi de la misma manera, llega el 0-7. De nuevo Arne pasa el balón al lugar adecuado, sólo que esta vez Gregory está listo para poner el balón contra las cuerdas.
El 0-8 final se decide gracias a que Vince controla un golpe franco alto delante de la olla y lo trabaja con una volea.
Otra contundente victoria para los hombres del C2, con elogios para la defensa que tuvo a los atacantes del Excelsior totalmente bajo control.
Tras el partido, todo el equipo regresó al Herdgang, donde estaba preparada una comida. Los chicos que vinieron con el C1 se unieron a esta, y después de la comida el viaje fue al estadio para ver juntos el partido PSV-Vitesse. Desde un palco, mientras disfrutaban de un tentempié y una bebida, los chicos tuvieron una excelente vista del partido y, a pesar del resultado, disfrutaron de una tarde muy merecida.